Tras echarle un ojo a la ruta de Sedosycuetos del circuito desde Los Llares a Cacedio y bajada por Cojorco, me animo a hacer la ruta
(
http://sedosycuetos.blogspot.com.es/2010/02/besaya-ccto-desde-los-llares-manzana.html), acercandome de paso al Moral, que hace años que no voy, y buscando una mejor opción de bajada al Joyancon. En azul se puede ver la ruta original y en rojo la que acabó saliendo.

La ruta, ya sin nada encima, es la siguiente.

La bajada desde El Perojo, que prometía, acabó siendo un descenso a cañón por la ladera, y cuando se llegó al Arroyo de Los Llares, un vadeo tras otro por las orillas hasta llegar al Joyancón. En fin, no todo iba a ser coser y cantar...

Salimos del área recreativa al fondo de Los LLares y cruzamos el río por el puente.


Un cartel explicativo y un poste señalizador nos indican el camino a seguir hacia la Braña del Moral, por el "camino viejo".

La pista nos lleva bordeando los prados de las afueras de Los Llares, bordeando el río del mismo nombre.


Ignoramos un pintoresco puente a mano izquierda y seguimos en paralelo al río.



Nos hemos separado del río Los Llares y el camino es un agradable sendero que remonta el Arroyo Las Cortes.



La señalización, a modo de estacas, es abundante, y no nos deja que nos liemos con algunos posibles desvíos.

Llegamos a un cruce de regatos, el cual pasamos gracias a un resbaladizo puente (aunque se podía haber cruzado saltando sin gran complicación).


Seguimos adelante para pasar por una zona con mayor presencia de piedra, y con algún murete antiguo.



Nos acercamos al arroyo y finalmente lo cruzamos con ayuda de otro resbaladizo y con pinta de que no va a aguantar.


Seguimos las indicaciones para enlazar con un profundo sendero, casi más cauce que otra cosa


Un poste señalizador nos indica cuando abandonar el sendero para hacernos a mano izquierda y ascender a una zona de abierto bosquecillo con mesas y asientos hechos con madera.


Desde aquí seguimos de frente a la izquierda para subir por una ladera llena de escajos y con unas cuantas estacas señalizadoras.



Encontramos un "tronco" señalizador que marca La Vargona, para comenzar un fuerte ascenso



En cierto punto convive señalización de PR, de SL, y otra de números con círculos.

Algo más adelante dejamos el sendero, casi cambera de lo amplio que era, para tomar por un senderillo en fuerte ascenso.


Hacemos un giro a la izquierda, ya en ladera sin árboles.

Y a partir de aquí no se sigue bien la señalización pero no hay duda: hacia arriba a cañón al bosquecillo que se ve en la cima.


Llegamos a él y vamos avanzando entre los árboles.



Pasamos un conjunto de piedras apiladas que dan lugar a un claro donde hay otro poste señalizador.


Salimos ya a una zona de braña típica. Estamos en La Manzana. No tenemos más que hacernos un poco a la derecha y crestear por las brañas.


Desde aquí vemos toda la divisoria del Asón con el Miera hasta arriba de nieve, desde el Porracolina hasta la EVA12 y Castro Valnera.

Seguimos cresteando y pasando por todo tipo de señalización hasta encontrarnos con un pintoresco colmenar.




Algo más adelante entramos en Cacedío, donde hay un refugio en buen estado, aunque algo limitado.

Desde aquí ya hay huellas de vehículos y enlazamos con una pista que nos deja en la zona de El Salce.





Desde aquí intentaremos volver al Joyancon más tarde. Ahora tomamos a la derecha para ir por pista hasta la Braña del Moral.

Enlazamos con la pista que viene de Obios y La Guarda.


Enfrente hay buena carga de nieve. Pasar de Tudanca a Polaciones tiene pinta de estar jodido.

Llegamos sin más historia a la Braña del Moral y su ermita-refugio.


Las vistas son impresionantes.


Volvemos, pero en vez de coger otra vez la pista, tomamos a través, subiendo a la pequeña elevación que tenemos enfrente.


Bajamos de nuevo a la pista y llegamos a El Salce.

Desde aquí tomamos a la derecha para llegar a un bebedero y seguir por el sendero que nos hará enlazar de nuevo con la pista de La Guarda.




Unos metros más adelante comienza una pista que desciende hacia la izquierda.

Por ella llegamos a al Perojo, mientras en el bosque a la izquierda se monta la de dios es cristo con una gigantesca manada de ciervos en estampida.

Descendemos directamente por la braña, pasamos un montículo de piedras y seguimos adelante.




Si nos fijamos, a la derecha surge una cambera que se adentra en el bosque, y por la que tomamos (para terror de los ciervos que vuelven a montarla).


La cambera hace un giro y nos deja en otr pequeña zona de braña.



Aquí se acaba lo buena y no queda otra que seguir descendiendo por la loma a derecho. El camino que siguen los animales por la arista es claro así que no hay problema.


A la derecha de la arista hay una especie de canal que baja a cañón y que evitamos (aunque visto a toro pasado, no me parece mala opción si se baja por un lateral, con paciencia).

Si seguimos bajando la arista y encontramos otra bonita cambera que hace concebir esperanzas de una bajada más sencilla.

Nada de eso, por la derecha degenera en sendero, despues en sedo, y finalmente nos damos contra un barranquillo de un arroyo. Por la izquierda la cambera se pone a ascender, lo que no es nuestro popósito, así que pasamos de ella y continuamos el plan original de descender.



A partir de aquí alternamos algo de arista con zigzags para evitar destrepes y finalmente nos ponemos a bajar hacia la derecha, para llegar lo antes posible al Arroyo Los LLares, cosa que conseguimos sin joder ningun tobillo.




Desde aquí vamos siguiendo el curso del arroyo hacia el Joyancón, con un tanteo final de vadeos cercano a la media docena. Afortunadamente no ha llovido esta semana y con un poco de paciencia y maña no nos mojamos.




Finalmente nos alejamos a la derecha del arroyo para enlazar con ela pista del Joyancon.


Desde aquí ya sólo queda seguir la aburrida pista que lleva a Los Llares, pasando a la derecha las desviaciones del Arroyo de La Teba (y La Aceiteria) y de las Llanas de Bustablao.


Cruzamos un paso canadiense y al poco llegamos al área recreativa inicial, tras 8 horas, 22 kilómetros y 1111 metros de desnivel acumulado.

Adjunto el track grabado con un Garmin Oregon 550. Un saludo!