Pues si……………….. Subimos al Mortillano (ó Mortilano) lo he visto llamar de las dos formas.

PORRACOLINA DESDE ALISAS
Aunque no completamos la totalidad de la ruta prevista, el camino andado fue suficiente para volver a comprobar la belleza de esta zona oriental de Cantabria.
Creo que puedo decir (yo y cualquiera de los que visitamos esta zona) que por más que caminemos por ella, siempre nos sorprende.
Solo llegamos al Mortillano. Desde allí decidimos darnos la vuelta.
Varios fueron los motivos que nos inclinaron la balanza hacia “el retorno adelantado”:
1º.- el camino en muchas zonas, es incomodo para andar. Ya había mencionado en la convocatoria de la presencia de lapiaz y esto hizo mella con mayor incidencia en alguno de nosotros.
2º.- Parte de la ruta estaba trazada sobre el mapa, mediante tracks para GPS recopilados en varias páginas web y otra parte se “invento” por este que escribe y aunque lo hice a conciencia, no quiere decir que lo hiciese correctamente.
El camino que había trazado desde El Mortillano hacia Peña Rocías es el lapiaz más agreste que podamos imaginar. Es un conjunto de “agujas” afiladas y altas totalmente intransitables, por lo que inevitablemente, deberíamos haber modificado los planes que llevábamos y “rodear” (si se puede) por el Oeste.
Estos dos motivos, valorados conjuntamente, fueron el contrapeso de la balanza.
La decisión fue tomada en mi opinión “ejemplarmente” pues se valoro la opción de que quien se encontraba físicamente en mejor disposición, continuase el camino. Esto podía haber sido una opción tan válida como la que se tomo, pero un gesto de solidaridad (y responsabilidad) afloro en ese momento.
La satisfacción de haber completado la ruta ó al menos de intentarlo, hubiera sido grande. Todos vamos al monte con la intención de completar los objetivos marcados pero fue mucho más grande el gozo de saber que vas acompañado de personas que no titubean ni un momento y responden que “hemos venido todos juntos y volvemos todos juntos”.
La confianza que imprime esta actitud, te hace sentir seguro junto a la gente que te rodea.
Volviendo al camino andado y por describir un poco la ruta en sí, decir que comenzamos en los Collados del Asón, caminando por un camino que transcurre entre cabañas y fincas ganaderas mientras el terreno permite este uso.

CAMINO ENTRE FINCAS GANADERAS
En cuanto el suelo por donde pisamos se vuelve pedregoso (lapiaz), ya no hay camino ni senda que valga.
Se trata de subir lo más recto que se pueda en función de las fuerzas que dispongamos en dirección a La Porra del Mortillano. (No confundir La Porra del Mortillano, con El Mortillano.)

Siempre teniendo en cuenta que tenemos que andar mirando hacia el suelo, sin apenas poder desviar la vista hacia el paisaje, pues estamos caminando (casi bailando) sobre “el filo de cuchillos” y hemos de poner toda nuestra atención en no meter la pierna en una grieta profunda.
Una vez llegado a “La Porra” (que requiere una ligera trepada) vemos la cumbre del Mortillano que es la parte más alta de este Macizo calcáreo. Una pequeña zona de pasto y un hoyo nos dan tregua a nuestras piernas para decidir porque lado “atacamos”. Nos va a dar igual: los dos vuelven a ser “cuchillos” y si vamos por la izquierda, volveremos por la derecha.

EL MORTILLANO
Llegados a la cumbre, nos encontramos con unas vistas fantásticas, con un buzón de montaña, con un vértice geodésico en muy mal estado (partido) y con una “torre” de piedras armadas “a canto seco” de forma circular.

VISTAS HACIA EL ESTE (HORNIJO Y EL MAZO GRANDE)

VISTAS HACIA EL OESTE (PORRACOLINA Y PICON DEL FRAILE)

VISTAS AL PIE DEL MORTILLANO (HOYOS DE LA YESCA Y EL BOSQUE DE HOYO SALZOSO)
Aquí nos encontramos con otra cuadrilla de montañeros con los que charlamos un rato y de los que nos despedimos rápidamente, pues tenían una comida encargada en el pueblo de Asón……….. Nosotros nos comimos nuestro bocadillo y nos dimos la vuelta hacia el coche donde dimos por bien finalizada la ruta.
La verdad, es que dimos un paseo más, pero esto dejo que lo describa alguno de mis compañeros.