En relación con la información sobre la prohibición de tránsito por las zonas oseras de Fuente Carrionas, os diré que me han informado que un guarda de la Fundación Oso Pardo ha sido atacado por una osa con dos crías en la Pernía, concretamente en la zona de San Salvador de Cantamuda. Parece ser que unos guardas que se encontraban el sábado en Piedras Luengas han informado a mi comunicante de dicho ataque. El guarda se encontró, por casualidad, a una osa con dos crías saliendo de unos escobales y le atacó. Parece ser que se ha salvado por los pelos, debido a que se hizo un ovillo en el suelo. Así todo le mordió en la pierna y casi le arranca una oreja. Después, pudo llegar hasta el vehículo y llamó a dos compañeros que vinieron en su ayuda.
Como podéis ver esa prohibición está perfectamente dictada (se debía hacer también en Cantabria), porque, además de la peligrosidad, es necesario dejar que estos animales en peligro de extinción puedan criar en paz.
